El Colegio Oficial de Enfermería de Toledo está desarrollando esta semana en su sede el curso “Atención de Enfermería al paciente y cuidadores con Alzheimer”, en el que están participando un total de 25 enfermeras, la mayoría de ellas profesionales de Geriatría y de Atención Primaria.
El curso pretende ahondar en una enfermedad que se ha convertido en una auténtica lacra social y que, en la provincia de Toledo, ha causado la muerte de 144 personas en los últimos cinco años. En España son 800.000 los casos de Alzheimer, a los que hay que sumar un millón de cuidadores, que padecen tanto o más que los propios enfermos esta terrible dolencia que afecta más a mujeres que a hombres. Por eso en este curso se incide tanto en la figura del cuidador y la necesidad de prestarle más atención.
El presidente del Colegio, Roberto Martín, afirma que “seguimos apostando por la formación continuada en nuestra Institución, para que los enfermeros toledanos tengan un constante reciclaje en conocimientos; por eso este curso, dirigido a un sector muy específico, no sólo informa de las fases de esta enfermedad, sino que también hace al alumno activo, con iniciativa para diseñar cuidados en el Alzheimer”.
Cuidar al enfermo y al cuidador
Consta de 20 horas, impartidas por el enfermero y Licenciado en Psicología Juan Luis Soto de Lanuza, y tiene entre sus objetivos actualizar los conocimientos de esta enfermedad en los profesionales de Enfermería. Además pretende que los participantes diseñen planes integrales de cuidados de Enfermería, pautas para ayudar al cuidador a través de sus autocuidados.
Tal y como afirma Juan Luis Soto, “se trata de enseñar a cuidar al enfermo y cuidarse a sí mismo, porque el papel del cuidador en esta enfermedad es fundamental. Son momentos de mucha soledad y, en numerosas ocasiones, se enfrentan a la falta de apoyo o a no saber cómo resolver ciertas situaciones con el enfermo, por eso desde aquí ofrecemos a los profesionales herramientas claves y pautas para actuar frente a esta enfermedad”.
Además, el curso aborda muy especialmente el aspecto de la prevención, “las enfermeras deben aprender a informar sobre este tema, porque es fundamental. Hoy en día sabemos que el Alzheimer está influenciada por una predisposición genética, pero que no es determinante, ya que también influyen la edad, la obesidad, diabetes, hipertensión y otros factores personales…”.
Respecto a la edad, las probabilidades de padecer esta enfermedad aumentan pasados los 85 años, concretamente hasta el 20% más de probabilidades. Pero por desgracia el Alzheimer también afecta a población más joven, aunque en mucha menor medida, “hay casos más jóvenes, de personas con 40 a 50 años, pero esta franja de edad tiene únicamente el 0,3% de probabilidades de padecerla”.
Prevención
Juan Luis Soto matiza que “hay maneras de prevención como el ejercicio físico, una dieta saludable, el control de enfermedades como la hipertensión, la diabetes, el colesterol, obesidad, tabaquismo… y la gimnasia mental, que nos proporcionará un aumento de la reserva cognitiva. Esto se consigue de muchas maneras: haciendo crucigramas, sudokus, teniendo vitalidad, inquietudes, curiosidad por la vida, querer hacer cosas nuevas, mantener la mente despierta, ver sitios distintos…”.
Sin embargo, una vez diagnosticada la enfermedad, que tiene distintas fases, el ejercicio físico, una dieta equilibrada y ciertos medicamentos, pueden ralentizar su evolución.
Por todo esto el curso no es meramente teórico, sino que intenta “remover” la profesionalidad y la inquietud de la enfermera. Son 20 horas muy dinámicas con videoconferencias, visionado de vídeos, exposiciones y trabajo en grupo para el diseño de estrategias de cuidado.